El lactato es uno de los biomarcadores más utilizados para determinar el pronóstico e incluso para guiar la reanimación de los pacientes con choque séptico, de hecho es parte de los criterios de diagnóstico de Sepsis-3, sin embargo, se requiere conocimiento para utilizarlo de forma adecuada, con integración clínica a la cabecera del paciente que padece infecciones graves y sepsis. El lactato puede ser una herramienta valiosa en cualquier lugar y especialidad donde se atienda a un paciente con sepsis, aprendamos a usarlo.